jueves, 3 de octubre de 2013

Reconstruyendo el Proceso de Práctica Docente



ANEXO 1:
Formato para la Reconstrucción
FORMATO PARA LA RECONSTRUCCIÓN DE ACTIVIDADES:
Descripción de actividades
Diseño metodológico
Valoraciones del proceso reconstruido
¿Qué?
¿Cuándo?
¿Dónde?
¿Quiénes?
Técnicas utilizadas
Proceso de aprendizaje
Factor facilitador
Consecuencia Positiva
Factor obstaculizador
Consecuencia Negativa





















Veamos a continuación el contenido de grupo de columnas:
La descripción de las actividades:
1. ¿QUÉ?: Nombre de la actividad o línea de acción a la cual apuntaba, haciendo referencia al objetivo planteado en el diseño (Practica Docente Supervisada realizada en XXX establecimiento).
2. ¿CUÁNDO?: Se anota la fecha en que se realizó la actividad o el período de tiempo en el que se desarrollaron las actividades (Ej.: día/mes/año, de 8:00 A.M. a 3:00 P.M…).
3. ¿DÓNDE?: Lugar físico y/o geográfico donde se realizó la actividad o el conjunto de actividades.
4. ¿QUIÉNES?: Número y caracterización más o menos detallada de los sujetos participando en la actividad (Ej.: 21 niñas y 17 niños entre 6 y 9 años, 4, 1 educadora y 1 educador; líderes comunitarios).
La metodología utilizada
5. TÉCNICAS UTILIZADAS: En esta columna se anotan las técnicas utilizadas en los diferentes momentos de la actividad. (Ej.: hoja de asistencia, lluvia de ideas, sociodramas, debate; ...).
6. PROCESO DE APRENDIZAJE: Hace referencia a las etapas lógicas del proceso de aprendizaje personal y colectivo que se facilitó entre las/os participantes para desarrollar el tema, haciendo referencia a los objetivos específicos planteados en el diseño (Ej.: Generando un ambiente de animación, propiciando la expresividad de las/os participantes sobre el tema, identificando el problema prioritario, analizando sus manifestaciones, causas y consecuencias, identificando posibles alternativas, asumiendo compromisos, evaluando;…).
Valoraciones del proceso a reconstruir
7. FACTORES FACILITADORES: Factores o condiciones –objetivas y subjetivas- que, a consideración del equipo facilitador pero integrando también los aspectos señalados por las/os participantes en su evaluación, intervinieron positivamente para la generación y realización de la actividad.  (Ej.: ambiente de confianza, recursos financieros, apoyo logístico, buena planificación, metodología participativa utilizada, orientaciones claras, dinámica atractiva, disposición e interés de las madres y padres;…).
8. CONSECUENCIAS POSITIVAS: productos considerados como logros cuantitativos y cualitativos obtenidos como resultados de la actividad (Ej.: participación activa de la mayoría, asistencia estable, participantes asumen compromisos, se superan los obstáculos;...).
9. FACTORES OBSTACULIZADORES: Factores o condiciones –objetivas y subjetivas- que, a consideración del equipo facilitador pero integrando también los aspectos señalados por las/os participantes en su evaluación, intervinieron negativamente en la generación o realización de la actividad. (Ej.: Local inadecuado para la realización de la actividad, planificación deficiente, falta de capacitación del equipo facilitador, orientación poco clara para el trabajo de grupos;...).
10. CONSECUENCIAS NEGATIVAS: Productos considerados como fracasos cuantitativos y cualitativos obtenidos como resultados de la actividad (Ej.: no se integran todas/os las/os participantes en la dinámica, no se alcanza a cubrir todos los objetivos planteados, la participación quedó centralizada en algunas personas, las/os participantes no asumen compromisos concretos;...).
A como señala Álvarez (1996): “… es importante aclarar que, en una lógica sistémica, no hay ninguna incoherencia en tener un mismo elemento apareciendo a la vez como factor facilitador y factor obstaculizador. Efectivamente, en Ciencias Sociales, las cosas nunca son totalmente positivas o negativas. Por ejemplo, mientras en unos grupos puede ser un factor facilitador la existencia de un liderazgo fuerte, en otros cuadros de reconstrucción este tipo de liderazgo puede estancar a la organización y ser un obstaculizador en el desarrollo del grupo”.
También la entrevista semi-estructurada a actores y actoras claves que participan directa o indirectamente y es una forma de ir registrando sus opiniones sobre el proceso.
De esta manera, las y los actores con quienes se trabaja forman parte activa del proceso de sistematización y no solamente el equipo técnico que se reúne en las oficinas del proyecto.  Por tanto, debe ser una práctica el incorporar en los talleres –o reuniones- algunas preguntas de sistematización. Algunas preguntas pueden enfocarse en conocer:
• ¿Qué está sucediendo en su comunidad o grupo durante el proceso de acompañamiento?
• ¿Cuáles han sido los avances y retrocesos del grupo?
• ¿Qué obstáculos se están presentando?
• ¿Qué facilitadores se están presentando?
• ¿Qué situaciones explican lo sucedido? ¿Qué consecuencias representan estas situaciones?
• ¿Cómo se pueden transformar los obstáculos en facilitadores o las debilidades en fortalezas?
Estas opiniones constituyen la visión subjetiva del proceso, permite profundizar en lo que se está sintiendo y viviendo durante el proceso de acompañamiento.
Alvarez (1996) expresa: “Lo que hay que destacar es que en los procesos de Educación Popular es importante: generar acumulaciones, potenciando lo que al principio era casual para convertirlo en fortaleza permanente del grupo. Desde luego, esta aparente incoherencia constituye más bien un indicador de éxito que nos debe alegrar”.
El registro de informaciones debe convertirse en una costumbre a construir como rutina cotidiana o después de cada actividad, de tal manera que se va acumulando, por orden cronológico y/o por sector de atención, todos los cuadros de reconstrucción y las entrevistas correspondientes al período que se va a sistematizar.
ANEXO 2:
Informes de Proceso
El ‘informe de proceso’ debe ser una expresión real escrita del producto de un proceso de aprendizaje, construido conjuntamente con otras/os actoras/es relacionadas/os.
Necesariamente es una expresión muy PERSONAL, ya que refleja en su contenido y forma la experiencia (como producto) de un proceso de aprendizaje vivido.  Independientemente que un proceso de aprendizaje sea colectivo, su producto será personal.
El reflejo del carácter personal del producto del aprendizaje es una de las particularidades esenciales del ‘informe de proceso’.
Al mismo tiempo, su elaboración, pretende contribuir a, facilitar la construcción de otra oportunidad de aprendizaje. Es decir, elaborando el mismo informe de proceso, vamos profundizando en nuestros aprendizajes, identificando los más significativos, descubriendo los vacíos y definiendo posibles caminos para seguir superándolos.
Concebida de esta manera, la ‘elaboración de un informe de proceso’ puede convertirse – siempre y cuando se hace ‘a conciencia’ – en una técnica muy particular de la construcción de oportunidades de aprendizajes significativos, que, además, permite conjugar muy oportunamente, lo colectivo del proceso con lo personal del producto de todo ‘aprendizaje’.
De cara a lograr lo aquí expresado, nos atrevemos a sugerir los siguientes aspectos técnicos en la elaboración de un Informe de Proceso:
1. En su parte introductoria debe ubicar claramente a la lectora o al lector en función de qué trata, en qué contexto y quiénes fueron las personas implicadas con sus roles específicos, incluyendo el autor o la autora del Informe de Proceso.
2. Una descripción del proceso llevado a cabo (reconstrucción metodológica), especificando los diferentes pasos y su coherencia lógica, valorando ‘subjetivamente’ su calidad, así como el ‘significado’ del producto obtenido.
3. Destacar e ilustrar claramente su papel personal particular (responsabilidades asumidas formal o informalmente) en todo el proceso. Valorar la incidencia de sus aportes en el producto obtenido.
4. Identificar factores que incidieron positivamente (facilitadores) en el proceso, a nivel personal y a nivel colectivo, y por ende en el producto. ‘Significar’ estos factores, es decir: describir su significado, su origen, su peso (importancia), su nivel de constancia, su…
5. Lo mismo en cuanto a factores que incidieron negativamente (obstaculizadores).
6. Plantear alternativas para mejorar procesos similares en futuras ocasiones u oportunidades, enfatizando específicamente en cuanto a cómo podría perfilarse un aporte propio más sustantivo todavía.
7. Concluir el informe con la indicación y justificación de los aprendizajes más significativos y su trascendencia, a nivel personal, institucional y comunitario.  No está demás plantear que todo informe de proceso pueda tener su aspecto muy personal, a través de la inclusión, por ejemplo, de algún esquema, una foto, un poema significativo,
una cita, una referencia,…
Todo informe de proceso debe caracterizarse por la expresión creativa de su autor(a)…
Todo informe de proceso es una producción muy personal y su lector(a) tendrá el reto, al revisarlo, a encontrar el significado personalizado que se pretende expresar a través de él.
Como autor(a) puedo facilitarle el trabajo a la lectora o al lector, o puedo dificultárselo…
Para finalizar, queremos hacer énfasis en la importancia de la ORTOGRAFÍA y la REDACCIÓN, su calidad es indiscutiblemente una expresión muy significativa de la calidad profesional de la autora o del autor del Informe. Buscar ayuda para lograr la perfección necesaria en esta parte no es ningún pecado, al contrario.


¡Ánimos – el trabajo es de cada una/o!

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